
ERICEIRA
TURISMO
IMPACTO DEL SURF EN EL TURISMO
Desde 2011, el surf es el principal motor del turismo en Ericeira .
El reconocimiento de Ericeira como la primera Reserva Mundial de Surf en Europa en 2011 marcó un antes y un después para el turismo local. Desde entonces, la ciudad ha experimentado una profunda transformación, tanto en el flujo de visitantes como en el crecimiento demográfico.
Con aproximadamente 10.260 habitantes en 2011, la población de Ericeira aumentó a 12.351 en 2021, lo que representa un crecimiento de más del 20 % en tan solo una década. Este incremento está directamente relacionado con el creciente atractivo del pueblo, que se ha convertido en un destino predilecto para turistas, residentes nacionales y extranjeros, surfistas profesionales y nómadas digitales.
Mientras tanto, se estima que el pueblo recibe entre 100.000 y 150.000 surfistas al año, procedentes de todo el mundo en busca de sus icónicas olas. Durante los meses de verano, la población se triplica, lo que pone de manifiesto la marcada estacionalidad del turismo.
El estudio EriceiraWSR+10, coordinado por el Club de Surf de Ericeira y financiado por la Unión Europea, confirmó que el surf ha mejorado la reputación internacional de la ciudad, impulsado el turismo y fomentado una mayor conciencia ambiental. Sin embargo, el mismo estudio destaca la importancia de implementar estrategias de gestión sostenible para evitar los riesgos de sobrepoblación y presión urbanística.
De esta forma, el surf no sólo proyectó a Ericeira como un destino turístico global, sino que también tuvo un impacto directo en el crecimiento de la población residente, revelando su importancia no sólo como motor económico y turístico, sino también como factor de transformación social y urbana.

Foto: Ericeira Mag / WSL
EXPERIENCIAS Y DIVERSIFICACIÓN
Aunque el surf es el principal atractivo de Ericeira , la ciudad se ha consolidado como un destino turístico diverso, capaz de atraer a diferentes tipos de visitantes. Además de olas de clase mundial, la región ofrece playas aptas para familias y bañistas, como Praia dos Pescadores y Foz do Lizandro, que combinan ocio, gastronomía y bienestar.
La tradición pesquera sigue siendo uno de los grandes atractivos culturales. El pescado y el marisco frescos forman parte de la identidad gastronómica local, que se entrelaza con las fiestas tradicionales, la artesanía y la autenticidad de las estrechas calles de casas blancas y azules. Esta combinación de tradición y modernidad ha convertido a Ericeira en un destino de referencia para quienes buscan experiencias auténticas.
La programación cultural y gastronómica también es un pilar del turismo local. Eventos como el Festival Internacional del Erizo de Mar, el Festival del Pan de Mafra, el Festival de Cine de Surf de Ericeira y las Fiestas de Nuestra Señora del Buen Viaje atraen a miles de visitantes cada año, reforzando la identidad cultural del municipio y creando un vínculo directo entre el patrimonio local y el turismo contemporáneo.
En 2023, Ericeira fue reconocida por la Organización Mundial del Turismo (OMT) como uno de los Mejores Pueblos Turísticos[1], un reconocimiento internacional que subraya la autenticidad de su oferta, la calidad de vida local y el compromiso con la sostenibilidad y el turismo de pequeña escala.
Otro fenómeno reciente es la creciente llegada de nómadas digitales y comunidades internacionales que eligen Ericeira para vivir y trabajar, atraídos por su proximidad a Lisboa, la buena conectividad digital, los espacios de coworking y, sobre todo, el estilo de vida saludable junto al mar. Esta tendencia ha dinamizado el comercio local y consolidado la imagen de Ericeira como un destino cosmopolita e innovador.
La oferta se diversifica aún más a través de actividades de bienestar y naturaleza, como clases de yoga al aire libre, senderos costeros, senderismo y recorridos en bicicleta, que complementan la experiencia turística y atraen a quienes buscan un turismo activo y sostenible.
De esta forma, Ericeira se consolida no sólo como la capital del surf, sino como un destino que ofrece multitud de experiencias —desde el mar a la cultura, desde la tradición a la innovación— manteniendo siempre su autenticidad.











